Cualidades en el Ser Humano

15.11.2012 00:00

          Todo Ser humano trae cualidades diversas para su modelo de vida, desde su infancia empieza el descubrimiento de ellas, en el desarrollo del crecimiento físico con el  interno, ambos son cuidados en parte por los padres o tutores, hasta alcanzar la mayoría de edad, donde el individuo es capaz de aplicar su aprendizaje primario, en la consecución de sus conocimientos para adquirir la nueva experiencia en el sendero de la vida.

          Las cualidades son trazos en  puntos de partida en el ciclo de la existencia, han sido clasificados en tres grupos: dominio de sí mismo,  tolerancia y contentamiento, unidad de propósito en la confianza. A éstas  existen condiciones necesarias para la inspiración interna como la alegría, el fervor y la libertad, que manifiestan alianza del hombre con Dios.

          Para el dominio de sí mismo, es preciso aprender a callar de palabra y pensamiento con la finalidad de constituir emociones fuera de irritación, impaciencia, angustia que nos impida el dominio de nuestra propia mente, para nuestras buenas intenciones y buenos propósitos, es necesario crear un agradable entorno, donde nada le turbe la serenidad, el equilibrio y la concentración al individuo, para brillar desde su propio interior y alcanzar sus metas en acción, cuantificado en el deber sujeto a sostener, soportar y dirigir la importancia Real aprendida ante las vicisitudes del impulso o circunstancia presentada, sin decaer la espiritualidad Divina.

          La tolerancia es la expresión elevada de la inteligencia, la perfecta comprensión del esfuerzo en la particularidad de los diferentes caminos que seguimos con una misma finalidad en la Razón Suprema del todo, en el perfecto conocimiento de la plena armonía antes de extender el brazo para  realizar un juicio de los errores cometidos; y el contentamiento es una condición indispensable para realizar todo propósito en la vida, con serenidad y alegría que no permita entrada a la depresión y descontento provocado por murmuraciones y lamentos de las dificultades de oposición en las contrariedades diarias. Éstas nos traen la oportunidad de impulsar nuestra fuerza interior que nos ayuda a ser positivos, actuando con benevolencia y Amor.

          La Unidad de propósito de confianza, es la sabiduría y coherencia de la concentración constante y oportuna, que corresponde a la frecuencia de las aspiraciones que se tengan en forma individual, para adquirir el fino propósito de la personalidad, que intensifique su absoluta confianza inspiradora de la sabiduría y su poder, desde el canal de  expresión máxima. Jamás debemos alimentar la desconfianza, que destruirá desde nuestra personalidad hasta nuestro trabajo y afectos, no debemos dejar ensombrecer nuestras vidas mucho menos contrariarnos por lo que nos acontece, al contrario aumentar nuestra confianza en nuestro Ser superior y redoblar el esfuerzo que nos conduce a la Unidad de la fuerza, la Realidad y el Poder del Amor.

I:.P:.H:. Eva Gallegos León 33° M:.A:.